“La innovación será el único camino para dar respuesta a las problemáticas de la sociedad, incorporándolas como parte estratégica de la organización”.

Desde el punto de vista del Liderazgo hay acciones que los líderes de las organizaciones tienen que hacer prevalecer teniendo en cuenta las megatendencias de este siglo XXI. Nos referimos hoy a: Internet de las Cosas, a privilegiar la Inteligencia Emocional, a la igualdad de los sexos y a la incorporación de la cultura 3.0 como los ejes de funcionamiento para que las organizaciones crezcan y continuen en el futuro.

A nivel mundial las empresas están enfrentando el gran desafío de aprovechar todo el potencial de la llamada Internet de las Cosas (o IoT, por sus siglas en inglés). Se estima que su impacto será tan grande como lo fue en el siglo XX la llegada de los computadores. Sin embargo, las empresas debemos preparar a nuestros colaboradores para vivir esta experiencia que cambiará la forma en que trabajamos, involucrándolos en el proceso y en los resultados de su implementación.

Diariamente, los seres humanos experimentamos una serie de emociones que pueden variar su intensidad dependiendo de la situación y el entorno. Además, las personas no somos islas emocionales, es decir, llevamos al trabajo nuestros rasgos, estados de humor y emociones, y obviamente nuestras experiencias y expresiones afectivas afectan –positiva o negativamente- a los demás y, por ende, a la empresa. Considerando lo anterior, es que la inteligencia emocional se ha convertido en una destreza crucial que deben manejar las organizaciones actuales.

La diversidad es clave para la sostenibilidad de cualquier compañía, ya que a través de la generación de recursos humanos diversos y un ambiente de trabajo centrado en la inclusión, las empresas impulsarán el crecimiento de sus negocios. Ahora bien, los objetivos de diversidad no solo deben tratar de cuadrar cifras de igualdad, sino que deben infundir un sentimiento verdadero de pertenencia e inclusión. La única forma de avanzar en este camino es a través de una transformación cultural que permita a hombres y mujeres desarrollarse en igualdad de derechos, lo que en la práctica significa materializar políticas que promuevan la conciliación de la vida familiar y laboral bajo un concepto de corresponsabilidad del Estado y de la sociedad en su conjunto.

La gestión del capital humano 3.0, Este nuevo paradigma apunta a ubicar a las personas en el centro real de las empresas, aprovechando su inteligencia individual y colectiva, con el fin de apoyarlas con herramientas para que desarrollen su verdadero potencial. Lo anterior se traduce en hacer confluir aspectos relacionados al trabajo, la socialización, la familia y aquellos materiales que buscan las personas en sus vidas cotidianas. De esta forma, la gestión del capital humano 3.0 ayudará a las organizaciones a alcanzar su óptimo rendimiento.

Lee Hecht Harrison ayuda a dar el próximo paso mediante estrategias, planificación y tácticas; desarrollando habilidades fundamentales que, al ejecutarlas en forma efectiva, logramos que la persona avance en su carrera hacia una posición en la que se encuentre satisfecha y realizada. Haga click aquí para más información.