El desempleo bajó a 8,7% en el segundo trimestre del año, 0,6 punto porcentual menos que hace un año atrás, pero debido más que nada a un abandono en la búsqueda de empleo, según informó el INDEC. En tanto, la recuperación de la economía todavía no genera nuevos puestos de trabajo.

Sucede que la tasa de actividad bajó a 45,4% en el segundo trimestre desde 46% de un año atrás. «Los motivos pueden ser opuestos: por un lado, el efecto desaliento ante la imposibilidad de encontrar un empleo y, por otro, la menor necesidad de complementar ingresos dentro de hogar en la medida que la situación económica (salario real de los otros integrantes del grupo familiar) mejora», indicó un informe de LCG.

Según esa consultora, si la tasa de actividad se hubiera sostenido, la tasa de desempleo habría subido a 9,9%.

Por lo pronto, la creación de empleo fue de sólo 0,68% en el último año, y concentrada en el interior del país. Se trata de unos 115 mil puestos de trabajo, según calculó FIEL. «En el Gran Buenos Aires, el empleo creció 0,06%», dijo Nuria Susmel, economista de la fundación.

Y esa tasa de creación de empleo quedó por debajo del crecimiento del 1% de la población.

El resultado es 1.088.000 personas desocupadas y 1.371.000 en condiciones de subocupación, por lo que 2.460.000 personas tienen problemas laborales en la Argentina, según el informe del Mercado de Trabajo del Indec.

La subocupación se ubicó en el 11%: la demandante, en 7,4% y la no demandante, en 3,6%.

Además, la creación de 0,6% de empleo contrasta con la recuperación del 2,7% interanual en la actividad en el segundo trimestre.

«Ahora es más lenta la recuperación de empleo respecto de la actividad. Pero el año pasado, cuando la economía cayó 2,2% no se sabe a ciencia cierta si se recortaron horas extras y turnos y la última medida fue despedir personal. Hay que dejar pasar el tiempo. Ahora se recomponen los turnos antes de decidir sumar un nuevo trabajador, por eso el empleo está siendo moderado», dijo Lorenzo Sigaut Graviña, economista Jefe de Ecolatina.

En tanto, la creación de empleo también contrasta con la recuperación del 1,5% del empleo formal que releva el Ministerio de Trabajo.

«El aumento del empleo formal no implica aumento del empleo agregado porque crece mucho el número de monotributistas y empleadas domésticas; no se trata de nuevo empleo sino de un blanqueo», agregó Sigaut Graviña.

Entre las regiones, Mar del Plata registró la mayor desocupación (11,9%) y el Gran Resistencia y Viedma y Carmen de Patagones los distrituvos que tuvieron el menor desempleo (1,6%).

En tanto, el Gran Buenos Aires registra una de las mayores tasas de desempleo (10%). Allí, los Partidos del Gran Buenos Aires (10,9%) sólo redujeron 0,3 puntos la tasa de desempleo debido a que la caída de la ocupación «ha sido más marcada que en el promedio del país: pasó de 40,5% a 40%», según LCG.

«En el Gran Buenos Aires es donde menos creación de empleo hubo, 4000 puestos de trabajo en el ultimo año. En el interior, si al campo le va bien, le va mejor. Los sectores más urbanos todavía dependen más de la industria, que tampoco arranca», explicó Susmel.

En la Ciudad de Buenos Aires la gente sin trabajo llegó al 7% y mejoró 1,5 puntos respecto de un año atrás.

En tanto, Cuyo mostró un descenso en su tasa de desocupación a 3,8% desde 5,2%; la Región Pampeana, a 8,8% desde 9,6%, y en el Noreste, a 3,5% desde el 4,9% anterior. Por el contrario, en la Patagonia y en el Noroeste la desocupación creció levemente en el segundo trimestre de este año: al 6,5% contra el 5,3% y al 6,9% desde el 6,8%, respectivamente.

El Cronista