Una investigación determinó que las personas más exitosas siguen rituales específicos y rutinas diarias, lo que se llama «hábitos ricos»
Randall Bell, socioeconomista y director de Landmark Research, ha estudiado los casos de éxito durante 25 años y ahora analizó las características fundamentales que todos los grandes triunfadores tienen en común.
En su nuevo libro «Me-We-Do-Be», correlaciona estadísticamente diferentes hábitos con distintas medidas de éxito tras encuestar a más de 5.000 personas en todo el mundo, incluidos los profesionales, estudiantes, jubilados, los desempleados y multimillonarios.
En su libro, Bell destaca que las personas más exitosas siguen rituales específicos y rutinas diarias, o lo que él llama como «hábitos ricos».
Ejercitarse. «Los que hacían ejercicio, aunque sea por 15 minutos al día, dominaron estadísticamente en cada medida única de éxito», escribe Bell. Toma de ejemplo al multimillonario Richard Branson -dueño de Virgin-, que despierta alrededor de 5 de la mañana y se ejercita antes de que comience su día laboral.
«Definitivamente puedo lograr el doble por mantenerme en forma. El cerebro se mantiene funcionando bien», dijo Branson en algún momento a FourHourBodyPress.
El británico está lejos de ser la única persona de éxito que prioriza esta actividad. Docenas de los principales líderes empresariales de hoy en día hacen un tiempo en sus apretadas agendas para hacer ejercicio, como el líder de Facebook Mark Zuckerberg o la gurú de los medios estadounidense Oprah Winfrey.
Ellos hacen su cama. «Los que hacen sus tareas y mantienen su espacio de vida más ordenada tienden a ganar más dinero», escribe Bell.
«Por ejemplo, aquellos que hacen su cama en la mañana son hasta un 206,8% más propensos a ser millonarios. Tienen una mentalidad productiva», explica.
En el libro «La fuerza de la costumbre», el autor Charles Duhigg llama a esto como «hábito piedra angular»: «Hacer su cama cada mañana se correlaciona con una mayor productividad, una mayor sensación de bienestar y las habilidades más fuertes de apegarse a un presupuesto».
Aficionados a la lectura. «Los que leen siete o más libros al año son un 122% más propensos a ser millonarios en comparación con aquellos que nunca leen o sólo leen de uno a tres», afirma Bell.
Un ejemplo claro es el hombre más rico del mundo, Bill Gates, que lee 50 libros al año, o Warren Buffett, quien reconocer que gasta hasta un 80% de su día en lecturas.
Se despiertan temprano. Bell no es el único en destacar que las personas exitosas comienzan el día antes que el promedio de la gente. En un estudio de hace cinco años sobre la opinión de 177 millonarios, el autor Thomas C. Corley encontró que casi el 50% de ellos se despertó al menos tres horas antes de que su jornada de trabajo comenzara en realidad.
Es una estrategia para hacer frente a las interrupciones diarias inevitables, como una reunión que fue demasiado larga, y así todavía tiene tiempo para llevar a cabo todo lo que se propuso hacer en el día, detalla Corley en su libro «Cambiar sus hábitos, cambiar su vida».
Tienen una buena etiqueta. En su investigación, Bell descubrió que recordar las pequeñas cosas, como saludar por un cumpleaños o enviar notas de agradecimiento, se correlacionan con el éxito.
Corley encontró algo similar en su investigación. «Los millonarios han dominado ciertas reglas de etiqueta», escribe en su libro, los que también se incluyen asistir a eventos, tener buenos modales en la mesa y vestirse apropiadamente dependiendo del entorno social. Dan prioridad a sus relaciones
«Poner un esfuerzo en el romance tiene beneficios», escribe Bell. «Los que están en relaciones de pareja satisfactorias son mucho más propensos a ser felices en general y producir más dinero».
«Los que tienen una cena habitual junto a su familia tienen un 41% más de probabilidades de ser feliz y un 43% más de probabilidades de ganar más de u$s100.000 al año», explicó Bell en una charla TED.
Planifican su día y escriben las cosas. «Aquellos que mantienen tanto un calendario y lista de tareas pendientes son un 289% más propensos a ser millonarios, en comparación con aquellos que no tienen horario fijo real», escribe Bell. Bill Gates y Richard Branson son devotos de tomar notas. «Cuando la inspiración llama, tienes que capturarlo», dice Branson.
Lee Hecht Harrison lo asesora para que grupos e individuos aprendan a afrontar el cambio, fortalezcan su compromiso y mantengan la productividad. Haga click aquí para más información.
