Un proceso de Outplacement en la vida nos puede abrir una ventana para aprender otro idioma. Hablar con fluidez un idioma es una de habilidades más demandas y valoradas profesionalmente que hay y la capacidad para comunicarse con la gente siempre será importante. Es un hecho. Pero el inglés tiene unas 750.000 palabras, y el japonés y el chino ni siquiera utilizan los mismos caracteres que los idiomas europeos.

Aprender a hablar otro idioma requiere mucho esfuerzo y, elijas el que elijas, tienes que tomártelo en serio. Sin embargo, hay algunas estrategias y trucos que pueden ayudarte a acelerar tu aprendizaje del idioma. Esta es la manera de llegar a dominar un idioma —o al menos estar muy cerca de dominarlo— en tan solo 12 meses.

VACACIONES FORZADAS: – Viajar al extranjero y sumergirse en el idioma

Lo que puedes aprender en el aula es limitado. Para dominar un idioma de verdad, tienes que lanzarte y vivir en algún lugar en el que lo tengas que hablar en todas las situaciones. ¿Para aprender español? Vete a Madrid, Barcelona, Playa Tamarindo o Buenos Aires. ¿Francés? Es el momento de pasar algunos meses (¡por lo menos!) en París o Niza. Tendrás que improvisar sobre la marcha y resolver problemas todos los días. Antes de que pase demasiado tiempo, comprenderás el idioma y encadenarás las respuestas adecuadas con total naturalidad. Esto es especialmente importante si estás aprendiendo un idioma con un alfabeto totalmente extraño, como el japonés o el chino. Desarrollarás un mejor acento, practicarás cada día sin darte cuenta, ¡y es la excusa perfecta para viajar!

Mirar televisión

Intenta seguir los argumentos y diálogos de una serie de televisión en un idioma diferente. Descifrar las conversaciones mientras que ves una escena ayuda a los centros del lenguaje de tu cerebro a comprender nueva información de una forma más interesante, como si estuviera resolviendo un rompecabezas, y así será más probable que recuerdes lo que has aprendido. Leer los subtítulos te ayuda a visualizar la estructura de la oración, y a comprobar que estás realmente entendiendo lo que estás escuchando. Puedes perfeccionar tu inglés viendo reposiciones de Friends, por ejemplo (aquí tienes otras series que son perfectas para aprender inglés), y si ves Narcos en Netflix pondrás en condiciones tu español en poco tiempo.

Preguntar, preguntar, preguntar…

La frase «¡No comprendo!» tiene que desaparecer de tu vocabulario. En serio, no ignores una frase que no entiendas bien, especialmente durante tus primeros meses, porque seguro que hay MONTONES de ellas que no tienes claras. Si hablas con alguien no tengas miedo de preguntar, y si lees algo que te deja pasmado, búscalo en Google. Los estudios demuestran que es más probable que se recuerden las cosas si se investigan, más que simplemente aprendiéndolas en clase, porque has tenido que resolver tu propio problema. ¡Y no se puede discutir con la ciencia!

Practicar y estudiar regularmente

La clave para aprender cualquier cosa correctamente es la constancia. Ahora estás empezando a familiarizarte con lo básico del idioma, reserva un tiempo fijo en tu agenda para ponerte a ello y centrarte de verdad. Durante al menos una hora cada día, revisa esas complicadas reglas gramaticales que te confunden o dedícate a aprender unos cuantos nuevos verbos. Practica con ellos al día siguiente para que se fijen en tu memoria a largo plazo. Sé inflexible (como cuando haces dieta o ejercicio), cuanto más te esfuerces, más pronto verás buenos resultados.
Aprende en tándem

Hablar en voz alta es una de las mejores formas de aprender, aunque puede ser complicado cuando todavía no te sientes confiado. Intenta estudiar y hablar con compañeros de clase que tengan un nivel similar al tuyo, practicaréis y mejoraréis juntos, las palabras pronto saldrán de forma más natural. Además, harás muchos amigos nuevos, que es genial.

Leer todo

Libros, literatura clásica y revistas, o la parte posterior de un paquete de cereales, acostúmbrate a leer palabras hiladas en frases en todas las cosas cotidianas. Sigue medios extranjeros de noticias, blogs y sitios web populares en las redes sociales, de esta manera, aunque no estés estudiando, el tiempo que pases en tu Facebook o Instagram no será tiempo perdido. Los libros de texto te pueden preparar para tener conversaciones educadas y comprar billetes de autobús, pero la mejor manera de ampliar tu comprensión del idioma es diversificar los materiales de lectura a los que expones tu cerebro.

Es hora de ver más televisión…

En otros sitios de internet, los canales de YouTube pueden mejorar tu conversación; para aprender francés, intenta suscribirte a Oh La La, Hollywood Speaks French. Como alternativa, intenta aprender viendo Tedx Talks en otro idioma. No solo escucharás ideas nuevas e interesantes de algunas las mentes más brillantes e innovadoras del mundo, los oradores también hablan claramente, así que es fácil seguirlos.

Hablar el idioma

Haz amistad con hablantes nativos fuera de clase y habla con ellos solamente en su idioma, es la mejor forma de practicar. Si estás en el extranjero, te será fácil conocer gente con tus mismos intereses si tienes alguna afición.

“Keep your chin up”

Esta peculiar frase inglesa significa que mantengas una actitud positiva. Aprender un idioma es difícil. Algunos días sentirás que estás mejorando y que casi dominas el idioma, y otros días te sentirás como si tu cerebro hubiera construido un muro para no dejar entrar a ninguna palabra extranjera. Un muro muy alto.

No permitas que esto te desanime, si sientes que tienes dificultades, mira atrás a los meses previos y tómate un tiempo para darte cuenta de lo lejos que has llegado: sobre todo después de un año! Persevera y lo conseguirás.

El Centro de Formación Profesional de Lee Hecht Harrison fue creado para contribuir al desarrollo del talento en las organizaciones. Conozca el programa de Desarrollo de Liderazgo, dirigido a líderes, futuros líderes y colaboradores, haciendo click aquí.