Sentirse escuchados y atendidos no es un requerimiento sólo de los clientes de tu negocio, también es una necesidad de los empleados.
Una encuesta global de Accenture llamada «El Camino Adelante», reveló que el 57% de las mujeres y el 59% de los hombres están insatisfechos con sus trabajos.
Pese a eso la mayoría de los profesionistas planean permanecer en sus empleos y reflejan esa insatisfacción en su desempeño.
Las mayores barreras que se detectan en el desarrollo profesional son la falta de oportunidades o de un plan de carrera (42% de los encuestados) y las responsabilidades familiares (20%).
Sin embargo, los participantes de la encuesta manifestaron tener apertura para incrementar su responsabilidad dentro de la empresa con puestos diferentes, capacitación y más horas de trabajo.
Para lograr que los esfuerzos y necesidades de los trabajadores empaten con los objetivos de crecimiento de la empresa, es necesario que se realice una estrategia en dos fases: la selección del talento que aporta mayor valor y el diseño de políticas para preservarlo mediante un buen ambiente de trabajo.
El libro «Cómo lideran los mejores líderes», de Brian Tracy, explica que hay una regla de oro que se debe seguir al seleccionar personal: elige lento, despide rápido.
Es decir, que el proceso de selección debe tener las etapas necesarias para que realices una elección favorable para el negocio, pues, una vez que elijas el talento que conformará la operación de tu empresa deberás apostar por él, y en caso de decidir su salida, anunciarlo sin demora.
«El mejor momento para despedir a una persona es la primera vez que se te cruza por la cabeza. Si tomaste una mala decisión durante el proceso de contratación no agraves el problema dejando a la persona incorrecta en el puesto», afirma el especialista.
Sobre el diseño de políticas para preservar a los empleados con talento, Martin Folino, director de la práctica de Talent and Organization Performance, de Accenture en México, explica que cuando eres jefe directo de un grupo de empleados no es recomendable conceder medidas de flexibilidad particulares, pues cuando haya un cambio de jefe éstas pueden suprimirse al no ser políticas de la organización.
Así, existen algunos tips clave para determinar tu estrategia de flexibilización, toma nota:
1. Identifica a las personas que son la fuente de talento más importante para tu empresa y sondea sus necesidades y aspiraciones en la organización.
2. Delimita las características comunes los empleados y divide las necesidades en grupos.
3. Diseña planes que puedan apoyarlos a tener un desempeño más armónico; escuchar música, destinar un tiempo de esparcimiento en la jornada laboral o dar incentivos como días libres y hasta trabajo en casa.
4. Acompaña esas políticas con objetivos de crecimiento y productividad.
5. Realiza un diagnóstico de los aspectos que deseas mejorar para que puedas hacer una medición de resultados.
6. Ajusta las políticas según el éxito que tengan las medidas que implementes.
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