A pesar de la existencia de cientos de páginas sobre política empresarial, de códigos de ética, de códigos de conducta, de valores organizacionales y de entornos laborales cuidadosamente definidos, todos los días ocurren casos de falta de ética en el lugar de trabajo.
Los lapsus de la conducta cotidiana a nivel ejecutivo pueden ser de gran porte, como fraude contable, uso indebido de información confidencial, acoso sexual o conflictos de interés. En general todos esos toman estado público y llegan al conocimiento de la sociedad. Pero están los otros, los pequeños que involucran cosas simples, como papel higiénico, fotocopias o lapiceras.
Un caso reciente fue el de Mark Hurd, ahora ex CEO de Hewlett-Packard, quien debió abandonar su cargo, según un comunicado público de la empresa, por haber violado los estándares de conducta de la organización. Hurd no había comunicado una relación personal que tenía con una de las contratistas, algo que constituía un conflicto del interés, no presentaba reportes de gastos satisfactorios y realizaba uso indebido de los activos de la compañía.
Susan Heathfield, asesora en temas gerenciales, afirma en su artículo “Did you Bring Your Ethics to Work Today” que si bien la mayoría de los trabajadores no tienen tanto para caer como Hurd, los lapsus de ética ocurren todos los días en los lugares de trabajo sin el título de CEO y sin que nuestras acciones se eleven al nivel de conflicto de interés o irregularidad contable.
Las acciones poco éticas provocan el desarrollo de políticas de conducta
Por lo general, las políticas existen porque algunos empleados no son confiables. Por ejemplo, muchos en Recursos Humanos cuestionan la eficacia de una política de licencias pagas que dividen los días disponibles entre personales, días por enfermedad y días de vacaciones. La única razón por las cual existen esas políticas, dice Heathfield, para definir la relación empleador empleados, es porque algunos pocos empleados se aprovecharon de los intentos del empleador de ofrecer días de licencia por razones de vida legítimas.
En consecuencia, los empleadores limitaron la libertad de la gerencia para tomar decisiones sobre situaciones individuales e instituyeron políticas para gobernar a todos. Los códigos de conducta o de ética empresarial existen para guiar la conducta esperada de los empleados honorables, pero en general existen por la misma razón. Algunos empleados se condujeron en forma inaceptable para el empresa.
Las fallas en la conducta adoptan todos los tamaños y todas las consecuencias. Algunas afectan a los empleados. Otras afectan a los grupos de trabajo y en casos particulares, a la compañía entera y su stakeholders. .
Algunos ejemplos de fallas fundamentales:
•Al usar el baño de la compañía usted usa el último trozo de papel higiénico o la última toallita de papel. Sin pensar en las necesidades del próximo empleado que vaya, usted regresa a su trabajo en lugar de solucionar el tema.
•Usted da parte de enfermo a su supervisor porque el día es hermoso y decide ir a la playa, o de compras o lo que sea.
•Usted traba una relación amorosa con un compañero de trabajo, aunque casado, porque nadie se va a enterar en la oficina. Sus cosas personales son asunto suyo, el romance no va a impactar en otros empleados ni en el trabajo.
•Usted deja su taza sucia en la pileta de la cocina. Ve que nadie mira y abandona la cocina rápidamente.
•Su compañía auspicia eventos, actividades o almuerzos y usted se anota para asistir y luego no va. O ni se anota ni va.
•Usted dice a un potencial cliente que es el vicepresidente a cargo de algo. Cuando ese cliente busca al vicepresidente en una exposición comercial usted le axplica a su jefe que el cliente debe haberse equivocado.
•Usted trabaja en un restaurante donde los mozos se reparten las propinas en partes iguales y usted no presenta una parte de sus propinas a la vaca común antes del reparto.
•Usted lleva {útiles de la oficina para uso en su casa porque suele hacer en casa trabajo para la oficina o porque ha hecho horas extras, o alguna otra justificación.
•Pasa varias horas al día usando la computadora del trabajo para comprar, pagar cuentas, entrar a su banco y buscar noticias que le interesan en su vida personal.
Usted usa la última hoja de la impresora sin reemplazar el papel, dejando la tarea para que la realice la próxima persona que debe usar la impresora.
Estos, y muchos más, son casos de fallas aparentemente inocentes, pero que demuestran falta de consideración hacia los demás en el trabajo.
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