La carrera profesional no siempre puede describirse utilizando la metáfora del ascenso a una montaña porque la “cumbre”, en las organizaciones actuales, muchas veces aparece difusa en una línea de mando cada vez menos vertical.

En ese contexto, las personas aparecen moviéndose en todas las direcciones de la organización y la parte superior del organigrama ya no es el único lugar donde es posible observar a los profesionales talentosos.

Gracias a los avances tecnológicos y a la mayor preparación de la fuerza laboral, las organizaciones hoy son más pequeñas, más planas, más ágiles e interrelacionadas. No es de extrañar, entonces, que las compañías estén dejando de mirar los cuadros de control de las gerencias para privilegiar a los equipos de alto desempeño y a los líderes con accountability.

¿Cuál es tu norte profesional en este escenario? Naturalmente la respuesta a esta pregunta depende del momento que estás viviendo en tu ciclo de carrera que, a su vez, se encuentra íntimamente relacionado con el ciclo de vida.

De acuerdo a la experiencia de Lee Hecht Harrison, un desarrollo profesional estratégico debe considerar 6 movimientos de carrera:

Lateral: un movimiento lateral implica un cambio en el puesto de trabajo pero no necesariamente un cambio de responsabilidad o “status”. Este movimiento puede desarrollar tu base de conocimiento, ampliar tus redes de contacto y te permite adquirir experiencia en áreas que pueden ser fundamentales para tus objetivos futuros.

Enriquecimiento: si estás viviendo un gran momento profesional, adquirir nuevos retos desde tu posición puede ser una gran alternativa. Realizar tu trabajo actual de manera más significativa, añade mayor valor a tu organización y le entrega mejor visibilidad a tu rol.

Vertical: tradicionalmente las ventajas de un ascenso están asociadas a la búsqueda de mayores ingresos, prestigio profesional y poder. El ascenso suele concretarse cuando las aptitudes de una persona coinciden con la estrategia de la organización.

Exploración: te has hecho la pregunta ¿qué más puedo hacer en esta organización? La exploración te permite identificar otros puestos de trabajo que requieren tus aptitudes, intereses y valores. Dicha búsqueda la puedes realizar participando de un grupo de trabajo temporal con otra área e involucrándote en un proyecto de corto plazo, por ejemplo.

Realineación: también se conoce como movimiento hacia abajo y es un modo de permanecer en la empresa, aunque comenzando una nueva dirección profesional.

Salida: esta decisión proviene del análisis de distintas alternativas, que arroja como resultado la siguiente conclusión: mi progreso profesional implica abandonar mi organización actual. Esta decisión debe considerar a conciencia la correcta evaluación de tus capacidades profesionales y las oportunidades que ofrece el mercado. Es conveniente evitar idealizar el escenario laboral en otras organizaciones.

Desde la perspectiva de la Directora de Talento de Lee Hecht Harrison (LHH) Argentina, Marcela Lomba, la evolución acelerada de las organizaciones en la economía actual nos permiten ver 2 movimientos adicionales: traslado geográfico y ascenso diagonal.

El primero, “aborda el posicionamiento global de las organizaciones actuales y su necesidad de movilizar el talento a través de distintos países. El movimiento horizontal, por su parte, se refiere a posiciones de mayor poder, relevancia o nivel de reporte pero en áreas diferentes a las de tu rol actual”, concluye Lomba.

Reconocerse en cada una de estas posibilidades de desarrollo profesional, te ayudará a pensar de mejor manera en qué momento se encuentra tu carrera. Ello te permitirá, entre otras cosas, definir en tu brújula personal dónde se encuentra tu norte profesional.

Lee Hecht Harrison ayuda a dar el próximo paso mediante estrategias, planificación y tácticas; desarrollando habilidades fundamentales que, al ejecutarlas en forma efectiva, logramos que la persona avance en su carrera hacia una posición en la que se encuentre satisfecha y realizada. Haga click aquí para más información.