El 1ro. de abril de este año entra en vigencia la Ley 21.015, que busca incentivar la inclusión laboral para las personas con discapacidad y que establece que toda compañía de más de 100 colaboradores, tanto pública como privada, debe tener un 1% de personas con discapacidad en su staff.
Sergio Valenzuela, gerente de Recursos Humanos de APL Logistics para Latinoamérica, dice que la importancia de esta ley radica en que genera las condiciones para el diálogo social que garantice a las personas con discapacidad una efectiva inclusión en el ámbito laboral.
“Con la promulgación de esta ley, las empresas podrán participar activamente en la generación de mecanismos de inclusión que disminuyan las barreras del entorno y creen oportunidades que dignifiquen el trabajo de las personas que cuentan con condiciones restringidas”, dice.
Por su parte, María José López, de Fundación ConTrabajo, detalla que la inclusión es un proceso que se debe hacer bien y con calma.
“Lo importante es buscar que exista equidad, tomando en cuenta las diferencias de cada una de las personas. En este contexto, es importante no caer en el desarrollo de la inclusión en base a la caridad, sino más bien a través de condiciones más justas para todos”, explica.
El cambio de esa mentalidad es lo que se busca con la legislación. “Lo primordial es generar instancias por medio de las cuales las personas se sientan parte del equipo, de manera que puedan interactuar con sus compañeros e integrarse al quehacer cotidiano del trabajo. Así, ambas partes se verán beneficiadas”, enfatiza el ejecutivo de APL Logistics.
El profesional agrega que “las personas con discapacidad se deben sentir parte de la compañía, sumándose a las actividades internas”.
El Mercurio
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