Con la gran popularidad de Facebook y LinkedIn, el Curriculum Vitae podría parecer cosa del pasado. Pero dada la proliferación de sitios web con ofertas laborales y redes de negocios online, es necesario que el CV esté siempre listo y actualizado.
Los potenciales empleadores hasta podrían estar leyendo nuestro CV sin que nosotros estemos buscando trabajo.
¿Lo ideal es detallar la historia laboral en orden inverso?
Ya no es así. Los CV ahora tienen más que ver con hacia dónde uno se dirige y qué tiene uno para ofrecer y no tanto de dónde provenimos. “Tiene que ser una vidriera que muestre quién es uno y qué se tiene para ofrecer”, dijo James Phillips, consultor de The Fuller CV, un servicio de redacción de curriculum vitae.
Elisabeth Marx, socia del headhunter de ejecutivos Heidrick & Struggles, sostiene que en niveles jerárquicos altos, las compañías buscan saber cuáles fueron los mayores logros: “Queremos ver cosas como una exitosa gestión de cambios, reestructuraciones, trabajo internacional y crecimiento del negocio”.
¿Cuáles son los errores comunes?
Uno debería comenzar por ser honesto y no exagerar. Con el crecimiento de las bases de datos electrónicas, es muy fácil detectar información falsa, como resultados académicos inflados. También hay que ser muy cuidadoso con las inexactitudes menores, como adivinar las fechas de empleos anteriores porque uno no las recuerda, señaló Sonja Stockton, jefe de contratación en PwC, porque aunque sean errores honestos no caen bien en las consultoras.
Marx asegura que menos es más. “A veces recibimos CV de 20 páginas, pero aún en niveles gerenciales altos, no deberían superar las dos páginas, y una hoja es aún mejor”.
Phillips agregó que este enfoque minimalista debería también aplicarse a la redacción del CV. “A menudo son demasiado pomposos y están repletos de clichés. Hay que ser claro y conciso”, recomendó.
¿El CV debería escribirlo uno mismo?
Uno se conoce a sí mismo como nadie y ese es un buen argumento para responder que sí.. Pero también hay buenas razones para opinar lo contrario. Por ejemplo, si uno hace algo una vez cada cinco años, probablemente no lo haga tan bien; y si uno se va a pasar cuatro días peleando con eso, lo mejor es pagarle a un profesional para que se encargue. Hay muchas compañías que se dedican a eso. De todos modos, los headhunters y agencias de selección de personal a menudo ayudan a los candidatos a pulir su CV. Y aun cuando uno mismo lo redacta, hay que buscar consejos preferiblemente entre personas que nos conozcan dentro el ámbito profesional.
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