Ante el coronavirus, tanto empresas como pymes han debido buscar alternativas para seguir operando. Una de ellas es la implementación del teletrabajo o home office.
Los especialistas entregan algunas recomendaciones para implementar con éxito el teletrabajo:
Conexión a internet: Es primordial contemplar que los funcionarios de la empresa u organización cuenten con una buena conexión en sus hogares y estén en línea para la ejecución del trabajo. En caso de que esto no sea posible, se recomienda contar con sistemas de conexión vía teléfono móvil.
Google Hangouts-Zoom-Team: Ambas herramientas están pensadas en la realización de videoconferencias. Estas plataformas, gratuitas en sus versiones básicas, pueden ser muy útiles para el desarrollo de reuniones entre los múltiples equipos de trabajo.
Ordenar tareas por prioridad: Es fundamental organizarse y saber quién y qué tareas debe realizar cada persona. Para eso, puedes crear directrices para tu equipo a través de correo y/o documentos compartidos. Además de esto, puedes utilizar herramientas para la administración y gestión de tareas, tales como Trello, Asana, Omniplan, BaseCamp, entre otras.
Uso de Microsoft Team: Estas redes sociales facilitan la comunicación entre los equipos de trabajo, a través de sistemas de mensajería instantánea. Esto es muy útil para abordar temas urgentes o de rápida coordinación entre los equipos.
Compartir archivos: Lo anterior permite estar conectado en cualquier lugar y acceder a elementos del trabajo como documentos en word, archivos pdf, entre otros.
Evitar viajes innecesarios: Si no es necesario acudir a la oficina o lugar de trabajo es mejor no hacerlo. Es mejor priorizar el trabajo a distancia.
Establecer horarios de descanso (ejemplo: hora de colación o break): Lo ideal para un trabajo efectivo es que sea de manera similar al trabajo in situ, vale decir, con horas de trabajo y también de descanso o recreación. Con esto, evitarás estresarte y no operar correctamente.
Hacer un espacio de trabajo exclusivo para trabajar: Contar con un lugar especialmente dedicado para trabajar, evitará caer en distracciones. Esto permitirá una división entre el mundo laboral y el personal, logrando así un espacio ideal para concentrarse y ser mucho más productivos.
Realizar un calendario con tareas y objetivos: Para planificar de buena manera el trabajo, no basta solamente con decir qué hacer, sino que también con fijar: ¿Qué queremos lograr? ¿Cómo lo haremos?
Estar en permanente contacto con tu jefe y equipo de trabajo: Se recomienda consultar a tus compañeros sobre cómo se están llevando cada una de las funciones y establecer plazos de entrega.
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