Una de las mejores costumbres y que menos se practica es la reflexión. Aquí van algunas expresadas con el menor número de palabras posible.
1- La comunicación es una ciencia y no una ideología.
2- La comunicación es Acción y la acción es Comunicación.
3- Como toda herramienta, la comunicación es neutra. Quienes no pueden serlo son los que se comunican.
4- Como todo instrumento, la comunicación es neutra. Como estrategia, siempre es interesada.
5- La comunicación se realiza sobre el Tiempo, sobre la inversión del individuo de una parte de su presupuesto-tiempo (vital), del cual siempre ignora el saldo.
6- Sólo admitimos comunicaciones en la medida que podemos rechazarlas.
7- Hay que distinguir entre el comunicólogo y el comunicador. El primero es un estratega con base científica. El segundo es un intermediario, como los actores, los presentadores televisivos y los locutores radiofónicos. Por esto resulta impropio y reduccionista que los DirCom se definan (sólo) como comunicadores.
8- Los humanos nos comunicamos por lo que tenemos en común. Una lengua, una cultura, signos, códigos, repertorios, y un lugar, el de la acción comunicativa, que puede ser real o virtual.
9- Los signos y sus códigos siempre existen previamente a la creación de mensajes y al acto de comunicación. Y con independencia de éstos.
10- Con las 80.000 palabras que integran la lengua española (o los 26 signos de nuestro alfabeto) se pueden escribir y traducir todos los textos del mundo.
11- Reducir la gestión de las comunicaciones a «generar percepciones», por excelentes que éstas sean, es reducir la estrategia al cultivo de las apariencias.
12- Cuando falta contenido, la comunicación es simple adorno (en el mejor de los casos).
13- No todo es comunicación. Decir «buenos días» al cruzarnos con alguien no significa que le estamos deseando que tenga una jornada feliz, sino simplemente que le hemos reconocido.
14- La irrupción de la cultura de servicios ha puesto en primer plano que «Servir es lo contrario de dominar».
15- Sí una imagen dice más que mil palabras, un símbolo dice más que mil imágenes.