La Revolución de Mayo en realidad no tuvo lugar en una fecha concreta sino que comprende los distintos hechos ocurridos durante 1810, sobre todo en lo que se conoce como la Semana de Mayo, y que acabaron con la declaración de la independencia del virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros.
Entre estos hechos podemos citar la jornada del 18 de mayo en la cual se celebra el “Día de la Escarapela Nacional Argentina”, porque fue utilizada por primera vez por un grupo de damas de Buenos Aires al presentarse a una entrevista con el entonces coronel Cornelio Saavedra, jefe del Regimiento de Patricios, en la fecha citada.
La Escarapela Nacional Argentina es uno de nuestros símbolos patrios, junto al escudo, el himno y la bandera. Fue por pedido de Manuel Belgrano que su uso se estableció por decreto del primer Triunvirato, el 18 de febrero de 1812.
Durante los preparativos para prevenir la segunda invasión inglesa, el Regimiento de Patricios de Buenos Aires usó un penacho blanco y azul celeste, color éste último que ningún otro cuerpo usaba en su uniforme. Al referirse a los Patricios, Bartolomé Mitre hace mención a este color en su “Historia de Belgrano”.
La mujer porteña, que tan destacada actuación tuvo en la expulsión del invasor, comenzó a utilizar en esos tiempos rebozos con los colores del pompón de los Patricios, identificándose con la causa: azul celeste con ribete blanco.
Luego, durante la mañana del 25 de mayo de 1810, en la casa de Miguel de Azcuénaga, estaban reunidos varios de los promotores del movimiento revolucionario esperando el momento de obrar si llegaba el caso. Entre éstos, estaba French y cuando se conoció la noticia de que el Cabildo no accedía a las aspiraciones de los patriotas, los que estaban en lo de Azcuénaga se dirigieron a la plaza. French, al llegar vio que gran parte de la multitud allí reunida ya llevaba la divisa blanca y celeste y entonces fue cuando entró en una tienda de la recova, compró cintas de esos colores y las distribuyó entre los suyos, siendo Beruti el primero de ese grupo que se colocó ese distintivo.
“En acuerdo de hoy, se ha resuelto que desde esta fecha en adelante, se reconozca y use la Escarapela Nacional de las Provincias Unidas del Río de la Plata, declarándose por tal la de dos colores: blanco y azul celeste; y quedando abolida la roja con que antiguamente se distinguían. Se comunica, a V. S. para los efectos consiguientes a esta resolución” decía el documento que en 1812 firmaron Feliciano Antonio Chiclana, Manuel de Sarratea, Juan José Paso, Bernardino Rivadavia (Secretario).
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