Les comparto algunas sugerencias simples para que no falle cuando se decida a tener un programa de teletrabajo en su empresa:

1.Comprometa a los Gerentes de las diferentes áreas con su idea de implementación en teletrabajo.
En especial no pueden faltar las áreas de Recursos Humanos, Sistemas y Administración. Sea paciente con los gerentes que se muestren opuestos al plan.

2.Asegúrese de que se seleccionen a personas en las cuales se pueda confiar, que tengan competencias y acepten teletrabajar en forma voluntaria.
No todos los empleados pueden ser teletrabajadores o estar interesados en el teletrabajo. Estar tranquilos y confiados en que el empleado va a ser capaz de desarrollar sus tareas a distancia, le facilitará la tarea. Es recomendable realizar estudios psicolaborales para asegurar una buena selección.

3.Sea claro en los criterios de selección y en la comunicación a los potenciales teletrabajadores.
Es importante que todos comprendan los alcances y las limitaciones del programa para no sentirse discriminados.

4.Capacite al teletrabajador, a sus jefes y a sus compañeros.
La adecuada comprensión de las políticas, uso de las herramientas, alcance del programa, coberturas legales de higiene y seguridad, y detalles del programa serán necesarios para el éxito del programa de teletrabajo.

5.Establezca períodos de prueba y esté dispuesto a la reversibilidad.
Ello podría ayudar a corregir errores. La reversibilidad es uno de los principios del teletrabajo. Significa que cualquiera de las partes (jefes o empleados) podría solicitar volver a la forma de trabajo anterior cuando las personas no se adaptan o los objetivos no se cumplen.

6.Fije objetivos medibles para cada puesto en forma clara y precisa. Evite sobrecargar de tareas al teletrabajador.
Este es un punto crítico en el programa. Establecer los estándares de un puesto presencial que luego permita compararlos con los resultados cuando el puesto se virtualice es una tarea ineludible. La sobrecarga de trabajo suele confundirse con aumentos de productividad.

7. Confeccione un contrato escrito y asegúrese de cumplir con la legislación laboral vigente (Accidentes de Trabajo, Código de Trabajo, jornada de trabajo, resoluciones, etc.).
Esta forma de trabajo representa un cambio en las condiciones de trabajo originales. Las personas deben estar de acuerdo y los pormenores deben estar escritos.
La responsabilidad empresaria no es transferible a los teletrabajadores. Aspectos relativos a ergonomía y a la seguridad del trabajador seguirán estando a su cargo. Tenga en cuenta algunos manuales de buenas prácticas que podrían ser de ayuda, así como las nuevas leyes y posibles resoluciones. Encontrará varios de ellos en “Enlaces” en www.teletrabajolegal.tic.org.ar

8.El hogar del teletrabajador no es una oficina de su empresa.
Determine los medios y los momentos de la comunicación para conocer la marcha del trabajo. Sea cuidadoso con las llamadas telefónicas y evite siempre que pueda el uso de webcams. No invada con sus controles la privacidad del teletrabajador.

9.Combine el trabajo presencial con el virtual, siempre que se pueda.
Siempre que las distancias lo permitan prefiera que algunos días los empleados vayan a sus oficinas. Ello le permitirá estrechar lazos con los compañeros y jefes, mantener la cohesión grupal y la comunicación. Además el teletrabajador mejorará su sentido de pertenencia a la organización.

10.Evite trasladar gastos de la oficina a los teletrabajadores.
Asegúrese de que los gastos que se requieren para trabajar a distancia sean cubiertos por la empresa. Algunos de ellos se relacionan a la conectividad a Internet, al equipamiento del hogar, al uso de impresoras, aumento de consumo telefónico y eléctrico, entre otros.

Sonia Boiarov

El Centro de Formación Profesional de Lee Hecht Harrison fue creado para contribuir al desarrollo del talento en las organizaciones. Conozca el programa de Desarrollo de Liderazgo, dirigido a líderes, futuros líderes y colaboradores, haciendo click aquí.