El teletrabajo, esa nueva forma de entender la jornada laboral desde casa, requiere que los líderes tengan la responsabilidad para tomar las riendas de sus equipos y mantener el compromiso de todos, a través de … la pantalla de la PC.

Pero, para poder optimizar el tiempo y los esfuerzos del trabajo a distancia los managers necesitan entender las ventajas y limitaciones de este modelo y así aplicar las mejores estrategias, logrando un equipo sólido y cohesionado.

Es de máxima importancia establecer objetivos claros para lograr la mayor eficiencia. Los empleados necesitan saber qué se espera de ellos y en qué momento para que puedan actuar en consecuencia. Es por esto que se deben establecer fechas de entrega y tareas claras que permita trabajar de forma independiente y lograr así los mejores resultados.

Por otro lado, una de las cosas más notorias en la dinámica del trabajo en remoto es, sin duda, la comunicación. En este sentido, las videoconferencias son una solución muy útil para mantener reuniones desde la distancia, ya que a través de la cámara se pueden ver las caras y gestos de las personas, lo que aporta calidez a las reuniones de equipo.

Otro punto es el team building. Y es que podemos establecer encuentros sociales con todos los miembros del equipo para conversar y hablar de temas más allá del ámbito laboral. He conocido empresas que hacen “fiestas” digitales para celebrar los éxitos personales y profesionales de los empleados.

Y ya que hablamos de éxitos, resulta primordial que los líderes reconozcan públicamente el trabajo de sus equipos. La separación física puede resultar fría y lejana en muchas ocasiones, por lo que es importante aportar el toque humano a las relaciones a distancia en todo momento.

Conclusión: la clave de una estrategia de teletrabajo exitosa pasa por tener una fuerte cultura corporativa, en el que la comunicación sea el pilar fundamental para construir una relación sólida y cohesionada entre todos los miembros del equipo.